Se configura un grupo empresarial cuando entre dos o más sociedades, nacionales o extranjeras, hay un vínculo de subordinación y existe entre las mismas unidad de propósito y dirección. Se entenderá que existe unidad de propósito y dirección cuando la existencia y actividades de todas las entidades persigan la consecución de un objetivo determinado por la matriz o controlante en virtud de la dirección que ejerce sobre el conjunto, sin perjuicio del desarrollo individual del objeto social o actividad de cada una de ellas . La declaración sobre la existencia de un grupo empresarial es competencia exclusiva de la Superintendencia de Sociedades, en los términos establecidos por el artículo 28 de la Ley 222 de 1995.